Cerré
la puerta con seguro y fui a la cocina, necesitaba un té con urgencia para
calmar un poco estas ansias que sentía y no podía controlar, llené con agua la
tetera y la coloqué sobre la estufa, y me senté en uno de los taburetes que
estaban en la barra de la cocina a esperar que el agua hirviera.
∞∞∞∞∞
¡Valentine!. –Escuche tras de mí. – ¡Valentine!
–Su voz se escuchaba lejana pero a la vez cerca. Me escondí detrás de un árbol
con la esperanza de que Augusth no me viera, hacia un rato habíamos salido de
la escuela y a pesar de que me ganaría un gran regaño por parte de mi padre,
quise pasar un tiempo a solas, pero Augusth decidió jugar a las escondidas, un
adolescente a fin de cuentas, sentí unos pasos detrás de mí y volteé, grité
como una chiquilla al verlo justo detrás de mí, me sostuvo por la cintura y
ambos carcajeamos.
-Es usted muy fácil de encontrar,
señorita Darklake, podría oler ese maravilloso perfume a kilómetros de
distancia.
-Igual no podría esconderme de ti
aunque quisiera, Augusth, sabes lo que siento por ti, ¿Cierto?
-Lo sé... –Y nuestros labios iban a
juntarse, pero...
∞∞∞∞∞
Me
desperté sobresaltada, me había quedado dormida cuando recosté mi cabeza en la
barra de la cocina esperando que la tetera sonara y me indicara que el agua ya
hervía, lo que soñé lo sentí más que real, toqué mi frente y sudaba, mis brazos
completamente erizados, y mis labios resecos. Corrí y apagué la estufa, ya el
agua se había secado casi por completo.
Olvidé
por completo lo qué inicialmente salí a hacer esta mañana; visitar a mamá, pero
en estos momentos, después de presenciar la pelea de Ethan con Chris y sobre
todo después de que él y yo nos besamos no me sentía capaz de salir de casa en
estos momentos, así que decidí continuar con la investigación sobre Valentine y
su familia.
Y
en vista de qué en la biblioteca no conseguí casi nada, la Web era mi siguiente
opción, subí a mi habitación, me senté recostada a la cabecera de la cama con
mi laptop en las manos y comencé, escribí en el navegador Familia Darklake y encontré una noticia publicada en un diario
local hace más de 60 años, en la que un hombre ya mayor de unos 80 años,
afirmaba haber trabajado en la mansión, y también haber cometido unos cuantos
crímenes para el señor Roberth, también leí que según la policía lo que esté
hombre decía no podía tomarse como elemento para realizar alguna investigación,
pues ya de los hechos habían pasado casi 50 años, y no habían pruebas que
determinaran algún crimen que investigar.
Pero
yo no me quedé tranquila con eso, crímenes,
de ser ciertos a cuales crímenes se refirió, y porque simplemente a nadie le
importaron. Anoté el nombre del hombre al cual entrevistaron, Heath Gibson, tal vez me serviría de
algo, pues era mejor tener un nombre a no tener indicios de nada.
Al
cabo de un rato y cuando la tarde comenzó a aparecer, yo aún seguía en la
laptop buscando, sin saber exactamente por donde empezar, tocaron a la puerta,
pero tocaron con tal insistencia que brinqué de la cama apesadumbrada, bajé las
escaleras casi corriendo y al abrir la puerta la sangre me hirvió en un
milisegundo.
-¿Qué
haces aquí? –Espeté molesta. -¿Qué quieres?
-Violet...
yo.... necesito que hablemos. –el descaro de Roxanne era magistral.
-¡Yo
no tengo nada que hablar contigo!, así que vete ya de aquí.
Iba
a cerrarle la puerta en la cara pero ella se interpuso. –¡Estoy embarazada,
Violet!
Entrecerré
los ojos mientras negaba con la cabeza, tratando de entender lo que acababa de
escuchar. -¿¡Qué dices!? –Pregunté.
-Estoy
esperando un hijo de Ethan, Violet, tengo que hablar contigo.
-Nosotras
dos no tenemos nada de que hablar, sí, estas esperando un hijo de Ethan, ¿y a
mi qué?, no es mi problema, ve y resuélvelo con él, y ya, ¡dejen de
entrometerse en mi vida!
Cerré
la puerta de un golpe, me volteé y me recosté contra ella, miré mis manos y
temblaban, mis rodillas flaquearon haciéndome sentar en el suelo, las lágrimas
comenzaron a salir de mis ojos, pero eran solo lágrimas pues no había podido
sacar el nudo qué tenía en la garganta y no me dejaba siquiera respirar, inhalé
profundamente y al exhalar no lo pude resistir, lloré hasta más no poder, lloré
con todas las fuerzas que tenía contenidas, quién era ella para afectarme de
esa manera, ¿por qué dañarme tanto?, si siempre fuimos amigas, desde niñas,
¿por qué goza hiriéndome de está manera?
Fueron
preguntas que me hice mientras me acurruqué en el suelo a llorar como una niña,
estuve así por horas y tuve que quedarme dormida aún en el suelo, pues lo
siguiente que recuerdo era la claridad de la mañana entrando por la ventana,
apenas entreabría los ojos cuando sentí algo como un susurro, Violet. Lo escuché varias veces, abrí
los ojos de tajo pero estaba sola en la sala de mi casa, me levanté casi
asustada, miré la hora, eran las 8 de la mañana, dormí más de doce horas sin
darme cuenta de nada.
Subí
a mi habitación y me metí en el baño, me miré en el espejo y tenía el rostro
hinchadísimo por tanto llorar, me quité la ropa por completo y entré en la
ducha, luego de un rato de un baño que me hacía más que falta, me vestí y
arreglé pues en una hora debía estar en la secundaria, bajé a la cocina y comí
un poco de cereal con yogurt, pero aún en mi mente rondaba la declaración de
Roxanne, un embarazo era algo que no me esperaba, pero debía masticar el
asunto, procesarlo y terminar de engullirlo, pues ya no había marcha atrás.
Agarré
mi cartera y el maletín, abrí la puerta de entrada de mi casa para salir, y en
el pórtico me encontré con un ramo de rosas, colocado en uno de los balancines,
miré hacia los lados pero no había nadie, y la calle estaba completamente sola,
bajé mi maletín y agarré el ramo que tenía una nota colocado entre las rosas.
“Desearía no ser tan estúpido y dejar
de arruinar momentos como el de ayer, lo siento, y espero que esto me redima un
poco. C”
Una
sonrisa se dibujo en mi rostro, porqué supuse que esa C, significaba Chris, me
sonrojé, “OH, por Dios, Violet, ahora te
sonrojas”, pensé, sostuve el ramo y agarré mi maletín, subí a mi auto, lo
encendí y manejé a la secundaria.
Al
llegar fui directo al laboratorio, coloqué las rosas en un florero con agua, y
dispuse llamar al hospital para saber como seguía mamá, hablé con mi padre y
aunque un poco molesto porqué tenía casi dos días sin pasarme por allá, luego
de explicarle lo sucedido con Ethan, me entendió, eso sí, prometiéndole pasar
luego de clases, sin falta.
Tuve
que colgar cuando sonó el timbre, pues los chicos comenzaron a llenar el
laboratorio, miré hacia mi escritorio para ver de nuevo las rosas, sonreí
ampliamente y comencé a dictar clase, la primera de 5 que tenía ese día.
Cerca
de las 5 de la tarde, terminé todo lo que tenía pendiente, salí de la
secundaria y decidí pasar por donde Peggy, hacía algunos días que no compraba
la tarta y además de calmar el antojo que tenía, le llevaría algo a mamá.
Llegué
al hospital cuando ya estaba por anochecer, entré en el ascensor y presioné el
piso donde estaba mamá, bajé y caminé por el pasillo hacia la habitación, al
acercarme escuché unas risas, y mientras más me acercaba se hacían más intensas,
fruncí el entrecejo y abrí la puerta sin siquiera tocar, y quedé con la boca
abierta.
Chris
estaba sentado justo al lado de mí mamá, sosteniendo su mano, ambos voltearon a
mirarme y quedaron en total silencio.
-¿Chris...
qué haces aquí? –Pregunté.
-Vine
a saber como seguía Charlize, y cuando supe que vendrías a visitarla, decidí
esperarte. –Se levantó de su asiento y se acercó a mi.
-¿Charlize?
–Pregunté extrañada, porqué trataba a mi mamá con tanta confianza.
-¡Sí,
hija!, que caso hay en que me traté de usted, si es tu amigo, además, sabes que
no me gusta que me digan señora.
-Lo
sé, mamá. –Repliqué. –Es que es extraño verte aquí. –Lo miré. –Y en tanta
confianza con mi mamá.
-Ya
te dijo que decidió esperarte, Violet, no seas tan quejona y desconfiada, tu
papá fue a darse un baño y Christopher se ofreció a hacerme compañía.
-Gracias,
Chris. –Dije y sonreí, él me guiño un ojo y prosiguió.
-No
tienes nada que agradecer, tu mamá es una mujer adorable. –Miró a mamá y ella
sonrió.
-Lo
dices solo para complacer, Christopher, tal vez si sea adorable pero un poco
achacosa por los años.
-No
digas eso, mamá, aún te conservas excelentemente. –Me acerqué hasta ella y le
di un beso en la frente. –Traje un poco de contrabando. –Le entregué unos
bizcochos que había comprado. –Esperemos que el doctor no se moleste.
-Mmmmm,
Violet, ¿podemos hablar? –Volteé a mirarlo y sus ojos brillaban al parpadeo,
denotando una dulzura y sencillez que solo había visto en los suyos.
-No
quisiera dejar a mamá sola, Chris...
-Anda,
Violet, nada va a pasarme, cuando regreses estaré en este mismo lugar, no te
preocupes, ve, que tal vez sea importante lo que tiene que decirte. -¡Hay,
mamá!, siempre tan... tan ella.
Me
encogí de hombros y suspiré. –De acuerdo, vamos. –Dije mirándola a ella con
ojos acusatorios.
Chris
y yo salimos de la habitación cerrando la puerta, dí media vuelta quedando
frente a frente con él. -¿Y sobre qué quieres hablar, Chris? – ¡Qué sea sobre el beso!, ¡Hay Violet,
cálmate!, grité para mis adentros.
-Quería
informarte qué ya comencé el papeleo para iniciar tu divorcio. –fruncí el
entrecejo más que decepcionada. –Necesito que vayas mañana a mi oficina para
que me firmes unos papeles.
-Mmmm,
¡Sí! –Exclamé fingiendo, ya ni sé que es lo que fingía. –OK... tú me dices la
hora y ahí estaré.
-A
las 8:30 de la mañana, ¿te sirve?
-¡Sí!,
pasaré por ahí antes de ir a la secundaria, solo me das la dirección y listo.
-Tú
tienes mis números, llámame antes que salgas de tu casa y te indicaré la
dirección. - ¿Por qué estás tan serio,
Chris?
-Me
parece bien. – ¡No claro que no está bien!
Pregúntale sobre el beso o las flores ¿¡qué esperas!?
-Mmmm,
bueno, Violet, creo que ya tengo que irme. –Se acercó hasta mí y me besó en la
mejilla, dio media vuelta para irse pero yo no podía permitirlo, no así.
-¿Chris?
–Pregunté acercándome a él. -¿Sucede algo?
Él
negó con la cabeza. –No, ¿por qué habría de pasar algo?
-¿Tú
dímelo? –Pregunté irónica, él frunció el entrecejo. –Me besas y te vas
corriendo como si huyeras de algo, luego me envías flores disculpándote,
visitas a mi mamá y ahora eres su amigo pero estás frío conmigo y no pasa nada,
¿explícame eso?
Con
sus manos en los bolsillos, agachó la mirada, ladeó un poco hacia los lados y
luego me miró. –Lo de ayer fue un error, Violet, un error que no se volverá a
repetir.
-¿Un
error? –Pregunté ofendida. -¿Entonces por qué las flores y sobre todo la nota?
-Me
pareció un lindo detalle para pedirte disculpas.
En serio, ¡Disculpas! Mátenme ya
porque no entiendo. – ¡Pues ahórratelas!, pues no
necesito tus disculpas, para mí no tienes que hacerlo, la culpa es mía por ser
tan ilusa, por no aprender nada, ¿cierto?
-No
entenderías, Violet, es mejor que todo quede como está, yo como tu abogado y tú
como mi cliente.
-Entonces
así será, señor Everestee, espere mi llamada temprano para ir a su oficina.
–Repuse más que molesta, molesta por la estúpida razón de que él despertaba un
mar de sensaciones en mí y el ver que yo le era indiferente me cabreó
completamente. Le di la espalda y entré de vuelta en la habitación, mamá aún
yacía acostada en la cama disfrutando los bizcochos y cambiándole al televisor,
solté un suspiro y me senté a su lado en la cama.
-¿Sucedió
algo, hijita?
Negué
con la cabeza. –Nada importante, mamá, era algo sobre el inicio de mi divorcio,
solo eso.
-Ya
entiendo la cara de desgracia que tienes. –Inquirió sarcástica.
-¿Cara
de desgracia? –Pregunté. -¿te parece?
-Es
entendible que te sientas mal, fuiste tantos años novia de Ethan, que sé, debe
ser duro haber estado tan poco casada con él, y terminar divorciándote.
Pero
en el fondo yo sabía que no me sentía mal por eso, al contrario, separarme de
Ethan fue lo mejor que pude haber hecho, las circunstancias no fueron las
mejores, pero cuando algo tiene qué pasar simplemente pasa. Me sentía mal por
razones locas, estúpidas e incomprensibles, me gustaba un hombre que al parecer
no me determinaba y se arrepentía de haberme besado, sólo a mí podía pasarme
esto, bueno, algo más que añadir a mi colección.
Me
encogí de hombros delante de mamá, su mirada compasiva era la que menos me
gustaba, pues solo me daba a entender que nada me salía bien. Estuve con ella
un rato más hasta que papá llegó, les dí un beso a cada uno y salí del
hospital.
Cuando
llegué a casa estaba molida completamente, tanto así que me fui a la cama de
inmediato y no volví en mi, hasta ya en la mañana cuando la alarma me despertó
justo a las 7am.
Luego
de arreglarme, y estar lista completamente llamé a Chris por teléfono para saber
la dirección de su oficina, y cuando ya supe dónde quedaba el lugar, subí a mi
auto y manejé hacia allá.
El
lugar ese encontraba en un edificio comercial, en dónde solo habían oficinas
creativas, estudios, y cuestiones profesionales, y en el cuarto piso debía
encontrar la oficina de Chris.
Subí
al ascensor y debo decir que me encontraba algo nerviosa, pues después de lo de
ayer no sabía como reaccionar delante de él. Marqué el número del piso y al
bajar la oficina de Chris estaba justo de frente, respiré profundo y toqué la
puerta.
-¡Adelante!
–Pude escuchar desde adentro.
Abrí
la puerta y entre, ahí estaba sentada detrás de su escritorio, vistiendo traje
y corbata como la primera vez qué lo vi, guapo en todo su esplendor, con la
diferencia de que la seriedad ahora inundaba su rostro y ni siquiera cuando me vio
eso cambió.
-¡Buenos
días!, Violet, ¿cómo estas?
-Muy
bien, debo decir. –Bien, ¡un carajo!
-Me
alegro, siéntate por favor. –Señalo al asiento frente a su escritorio. –Ya aquí
tengo los papeles listos para que los firmes, y así comenzar la demanda de
divorcio.
-¡Genial!
–El sarcasmo presente. –No hay mejor forma de comenzar el día, ¿cierto?
-Sé
que es difícil una separación, ya lo he visto en otros casos, pero es lo que
quieres, ¿o no?
-¿Y
qué importa lo que yo quiero? –Una sonrisa triste se dibujo en mis labios, y el
doble sentido en esa pregunta.
-Importa
y mucho. –él fijó sus ojos en los míos. –Si no quieres divorciarte entonces...
Lo
paré en seco ofuscada. – ¡Eres un completo idiota!
Él
frunció el entrecejo. –Creo que eso le quedaría bien a tu marido.
-¡Ex!
Querrás decir. –Repliqué. –Mira ya acabemos con esto, dame los papeles para
firmarlos y así poder irme pronto.
Colocó
los papeles en frente de mí y me señalo donde debía firmar, me entrego un bolígrafo
y todo lo hizo en completo silencio, silencio que odiaba.
Firmé
los papeles y se los entregué. –Entonces, supongo que ahora debo esperar tu
llamada.
-Exacto,
Violet, cuando introduzca la demanda de divorcio hay que esperar unos días
hasta que proceda, y cuando eso suceda te llamaré, ¿de acuerdo?
Asentí,
lo miré esperando algo más, un ¡lamento
ser un idiota! A algún, ¡me encanto
besarte pero no quiero admitirlo!, pero eso no llegó, así que me levanté de
la silla y me despedí.
-¡Adiós!
–Dí media vuelta sin esperar respuesta de su parte, caminé hacia la puerta pero
me detuve cuando sentí su brazo sosteniendo el mío.
-Esto
no puede ser, pero ya que, ¡maldita sea!, Dios sabe que lo intenté.
-¿Qué
intentaste que? –Pregunté sin saber nada, lo que decía era irracional, y me
dejo más que confundida.
-Esto.
–Y me besó, tan simple como eso, sus labios se pegaron a los míos, junto con su
cuerpo que me acorraló a la puerta, mis ojos estaban casi desorbitados pues no
entendía su reacción, no lo entendía para nada a él, pero me venció y caí
atrapada al deseo de sentirlo cerca de mí y de que sus labios siguieran devorándose
a los míos.
ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh q emocion ...q ocultara cris q no quiere entregarse al amor mmmmm q sera genial capitulo esperreos el proximo
ResponderBorrar¿Ocultará algo Chris? eso debemos averiguarlo siguiendo de cerca la historia... Besos Elisa y gracias por leerme
Borrarmuy interesante ,como siempre ,gracias e nuevo ,un beso
ResponderBorrarGracias Geles, y se pondra más interesante lo prometo, nos leemos este lunes....Besos
Borrarbonito pero muy cortitooooooooooooooooo................estoy bien intrigada por los sueños y voces que escucha violet y que esconde chris???? estará relacionado??? el maldito de ethan es capaz de obligar a roxxane a abortar es un desgraciado.....pero la historia es buenísimaaaaaaaaaaaa
ResponderBorrarSiii son cortos, pero es porque los publicaré en partes, asi son dos dias a la semana y no hay que esperar tanto por el capi jejeje hay muchas cosas en esta historia que iremos descubriendo poco a poco y para poder entenderlas no hay que perderse ningun capitulo, gracias Dinora por leerme...Saludos
BorrarEsta historia me esta gustando cada vez mas, hay muchas cosas escondidas que la hacen muy interesante.
ResponderBorrarQue descaro de la amiga ir a casa de Violet y decirle que está embarazada de su ex, es el colmo.
Muchas gracias por el capitulo, ya espero con ansias el martes. Un gran trabajo y me gusta mucho leerte.
Nos vemos y te mando un abrazo.
Muchas cosas escondidas, que se iran develando conforme avanza la historia, Diana este lunes el proximo capitulo no dejes de leerlo, gracias por tus palabras... Besos
Borrartan bello Chris !!!!!! yo quiero uno asi medio salvajon !!!!!
ResponderBorrarun besazo !!!!
Glady jejeje yo tambien quiero uno así, por eso mientras lo consigo me conformo con Chris el salvaje jajajaj, nos leemos en el siguiente... Besos
BorrarQuedé picadaaaaaa! Me gustó mucho el capti ... empieza lo bueno. Cuando subes el otro?
ResponderBorrarAmihaaaaaaaaaaaa sabes que me encanta dejarte picada, el lunes el siguiente... Besitos
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